Oficial de los cazadores
Oficial de los Cazadores al mando, Géricault
Géricault pintó este cuadro cuando tenía sólo 20 años. Dicen que el pintor se inspiró en un caballo que él observaba en Saint-Germain, y también de otros artistas como Rubens, Vernet y Gros. El jinete está inspirado en uno de sus amigos, el teniente de caballería Alexandre Dieudonné.
Claramente en el cuadro hay dos personajes principales que tenemos que analizar: el caballo y el jinete. El caballo es un caballo gris saltando frente a un obstáculo, con los ojos abiertos por el miedo y al mismo tiempo la nariz dilatadas por la emoción. Si observan bien, el cielo se divide en dos partes, el crepúsculo y el fuego, a lo largo de una misma diagonal marcada por el la forma ascendente del caballo. El jinete permanece firme en su silla de montar, sin pestañear. Pareciera que el oficial está dando una orden por el movimiento de la espada. Lo vemos observando a sus tropas y probablemente les está hablando, sin embargo, no está claro hacia dónde se dirige su mirada.
© Tourblink
El escenario de fondo aparece completamente abocetado, lo que tentativamente indica que el artista nunca concluyó su obra, aunque también existe la posibilidad de que fue pensado de esa manera para darle una sensación de infinidad entre el polvo suspendido el aire y los restos de pólvora.
De este lienzo se conservan diversos bocetos, entre ellos uno muy destacado en óleo sobre papel, el cual se encuentra en el Leicester Museum de Reino Unido. Por otro lado, de Géricault se conservan un sinnúmero de bocetos de caballos, ya que tenía una especial fascinación por los caballos, especialmente por su fuerza.
No es de sorprenderse que Géricault murió en consecuencia de una caída de caballo, pues fue un apasionado de estos cuadrúpedos durante toda su vida.